Se trata de dos presos que están condenados a muerte.
Viene el primero y el guardia le dice:
¿En qué prefieres morir, en la silla eléctrica o en la cámara de gas?
Y el muchacho le dice:
En la silla eléctrica.
Lo sientan y le conectan todo y le dan al interruptor 2 veces y no funciona. Como tuvo suerte El guardia lo deja libre y el muchacho le susurra al otro preso al pasar:
¡La silla está mala!
El guardia pasa al otro preso y le pregunta lo mismo a lo que el segundo preso responde:
La cámara de gas porque, la silla está mala.
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