La nueva maestra encargada de la educación física se presenta con el director de la escuela:
Profesor: Buenos días maestra, bienvenida a la escuela antes que nada le quiero agradecer el que esté interesada en partir clases en esta institución.
Maestra: no me tiene que agradecer nada, siempre me ha gustado dar clases y poder enseñar mis conocimientos a los demás.
Profesor: Mire le voy a ser sincero. Usted es la cuarta maestra en este ciclo escolar que viene impartir la clase de Educación Física, normalmente no aguantan la presión de los alumnos, principalmente los alumnos Jaimito y Pepito son los que acaban tronando a todos los maestros. Necesito que se prepare mentalmente porque ellos siempre encuentran la manera de sacar de quicio.
Maestra: No se preocupe señor director yo tengo una maestría en educación infantil y sé cómo controlarlos, solo necesito usar una de las técnicas donde el maestro baja el nivel del estudiante y de esa manera hay una mejor conexión mire por ejemplo: a mí no me gusta que mis alumnos se dirijan a mí como maestra o como Miss ellos me deben llamar por mi nombre, eso hace que se sientan en confianza y tengamos una mejor comunicación.
Profesor: muy interesante pues vamos a ver cómo le va el tiempo dirá por lo pronto pase a la cancha de básquetbol a impartir su primera clase.
La maestra llegó y para su sorpresa le tocó el grupo de Pepito y Jaimito y le dijo a sus alumnos.
Maestra: Buenos días niños soy su nueva maestra de Educación Física mi nombre es Regina por favor les pido que me llamen por mi nombre así que les pido que se lo memoricen. A ver tú niño el de la gorra azul ¿Cómo me llamo?
– Usted se llama Regina maestra.
Maestra: muy bien, muy bien. A ver tu niña, ¿Cómo me llamo?
– Usted se llama Regina maestra.
Maestra: correcto, muy bien.
En ese momento se percató que Pepito y Jaimito estaban distraídos jugando a las peleas.
Maestra: A ver niños, ¿Cuál es la falta de respeto? estoy presentándome y ustedes no ponen nada de atención a ver tú el de la camiseta roja, dime ¿Cuál es mi nombre?
Jaimito no tenía una idea de cuál era el nombre de la maestra porque había estado distraído con Pepito toda la clase, en eso se acerca una compañera y le dice:
– La maestra se llama como lo que tenemos las mujeres en medio de las piernas pero con r.
Jaimito: ya me acordé maestra su nombre es ranocha.